Cuando empezaron a salir, nadie confiaba en una relación como esa. A Jesús Luz, el novio de 23 años de Madonna (quien este año cumple 52), se lo llamó juguete sexual, toy boy, pasatiempo.
Pero parece ser que el tiempo se ha puesto de parte de la pareja, que ya lleva más de un año de noviazgo, y el modelo brasileño, quien empieza a brillar con luz propia, ha comenzado a hablar incluso de cómo le gustan las chicas.
“Siempre me ha gustado mantener relaciones estables y eso es difícil que una chica joven te lo pueda dar”, ha declarado Luz a la revista británica Grazia.
“Es difícil que una joven tenga una mentalidad suficientemente madura como para gustarme, por eso siempre acabo saliendo con mujeres mayores”, confiesa.
Siempre con mucho cuidado de no mencionar a su famosísima novia, pero refiriéndose a su mujer ideal como lo más parecido a ésta, Luz cuenta que tal como la espiritualidad es para él una materia esencial a la hora de elegir pareja (no es casualidad que Madonna lo haya acercado a la Cábala, una corriente de la mística judía que ella practica escrupulosamente), la belleza no lo es tanto.
“Es verdaderamente importante que la mujer con la que estoy tenga una vida espiritual profunda y una mente abierta”, asevera el brasileño. “La belleza me atrae, claro. Pero no es algo que necesito tanto como confiar en la persona y que ésta tenga sentido del humor. Es que soy un payaso”, indica.
Consciente de que su creciente popularidad se la debe principalmente a su conocidísima novia, Luz reconoce que el día en que empezó a cambiarle la vida fue cuando tuvo la oportunidad de posar para unas fotos de la revista W y conocer a la propia Madonna.
“Las cosas se iban desarrollando bien en mi carrera cuando salió ese trabajo, pero eso fue lo que realmente dividió las aguas. Posar para una revista reconocida, frente a un fotógrafo top y una artista como Madonna”.
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